En la última etapa de esta gran ruta costera, extrañas rocas de varios colores, entre ocres, rojos, grises, blancos y negros, contrastan con el azul fuerte del mar, manteniendo cautiva la mirada del caminante. Nuestro viaje termina en la ciudad de Lagos de donde, mucho antes de que llegaran turistas de todo el mundo en busca de sol y playa, los portugueses partieron para descubrir el mundo.
En la última etapa de esta gran ruta costera, extrañas rocas de varios colores, entre ocres, rojos, grises, blancos y negros, contrastan con el azul fuerte del mar, manteniendo cautiva la mirada del caminante. Nuestro viaje termina en la ciudad de Lagos de donde, mucho antes de que llegaran turistas de todo el mundo en busca de sol y playa, los portugueses partieron para descubrir el mundo.